
La partida a la ciega entre Vladimir Kramnik y Magnus Carlsen terminó con una pequeña tragedia para el joven noruego. En una posición que muy probablemente era ganadora para él, Carlsen estuvo a punto de realizar su movimiento cuando de repente se dio cuenta de que dicha jugada sería perderdora. Desafortunadamente para él y, como se le estaba acabando el tiempo, no tuvo tiempo suficiente para pensar otro movimiento. Fue un final triste para una partida muy reñida en la que ambos jugadores habían mezclado momentos inspirados con descuidos. Kramnik comentó que quizá no debería haber sacrificado la pieza, pero explicó que lo hizo porque "tenía ganas de pasarlo bien". Carlsen tampoco estaba completamente satisfecho con su juego, pero opinó que habría tenido buenas posibilidades para ganar si pudiese haber seguido jugando. Via Chessbase
Como siempre las partidas se pueden consultar en el blog Partidas Ajedrez Comentadas.
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